sábado, 7 de enero de 2017

Un puñado de tierra
de tu profunda latitud”
Hérib Campos Cervera



Yo soy muy de sábado por la mañana, muy de la finalidad del conocimiento se agota en el rojo de tus ojos, muy de decirte que enciendan la hoguera, que arda todo, que el punk vuelve y tiene más fuerza, porque ahora el punk es casi como una categoría burguesa donde mirar al horizonte con un cigarrillo en la boca mientras comes en un burger americano clase alfa de globalización es muy jeunesse rebelle y muy de cabeza alta y gafas de sol y que precisamente por eso lo más punk es lo más you, lo más corazón de verano y pasarela de parís. Porque por un puñado de tierra no vamos a hacer excepciones, ni vamos a mirarnos a la cara con retraso, ni vamos a ofrecernos a la costumbre de cedernos espacios, de tenernos en la pupila. La única prueba de un posible delito en contra de la autonomía personal es la propia convicción de la existencia o no de dicha autonomía. La jeunesse rebelle están provocando el caos con sus mecheros made in China. Dice Nicanor que dice Kent: “Profeso no ser menos de lo que parezco, servir fielmente a quien confíe en mí, entenderme con el hombre de bien, alternar con gente discreta que sabe mucho pero dice poco, cuidarme de la opinión pública, pelear cuando no hay alternativa, y no comer pescado”. Amén al fuego, amén al punk desde el hotel ritz, amén a la opinión pública. Muy de los sábados por la mañana y de recostarme hacía la nada esperando a la nada y mirando la nada con un fondo musical muy punk y muy jeunesse rebelle, muy del fuego que está prendido cerca tuya pero no te das cuenta y crees tener frio, muy del latín convictio, muy “Un puñado de tierra de tu profunda latitud”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario