martes, 6 de septiembre de 2011

El día...

Jamás se me olvidará el día en que me dijiste
que escribía verdades a medias,
en ese momento pensé que todos
necesitábamos mentir si queríamos seguir vivos
y que sino fuera por eso huebiera acabado
como el poeta que describían mis poemas:
un poeta más metido en la muerte
que en la vida,
un poeta inútil.

Pensé que de alguna forma la literatura me había
salvado la vida,
pero no dije nada, dejé que la noche acabase
y que siguieras pensando que soy un agente doble
infiltrado en una escena sucia y oscura,
prendí el mechero y fui dejando que la oscuridad
empezase a darme sueño.

(2010. "Poetas imberbes" Parte segunda:
Poemas que dejó un adolescente tras su muerte.)

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